Iglesia San Nicolás de Tolentino exhibe su altar de muertos

En las instalaciones de la Iglesia San Nicolás de Tolentino, los feligreses exhibieron este viernes, su altar en homenaje a los difuntos, ofreciéndolo al público en general, para que pudieran colocar la imagen de sus familiares y que la sociedad ramosarizpense se uniera en oración para todos los que se adelantaron en el camino.

El padre Roberto Velázquez Tetatzin, oficializó este viernes con una misa, el homenaje a los familiares difuntos de los ramosarizpenses, donde se colocó un altar de muertos con todas las costumbres y tradiciones correspondientes a la fecha.

Con mucho respeto y alegría los fieles a esta iglesia, se unieron para levantar este altar, donde se colocaron calaveritas de azúcar, pan de muertos, velas, la cruz de sal y muchas otras cosas que llenaron de color dicho homenaje.

A tempranas horas de este día, las primeras personas llegaron a colocar la imagen de sus familiares, para que un aproximado de 10 personas se unieran también a la causa y rendir homenaje todos juntos a los difuntos.

El padre Roberto, mencionó como se vive por parte de la iglesia esta fecha, asegurando que es válido rodar unas cuantas lágrimas por los que ya no están, pero que al final del día no deja de ser una fiesta para los que aún estamos en este plano terrenal.

“Nos gusta mucho esta celebración aquí en la iglesia, es una tradición que nos identifica meramente como mexicanos y es un muy buen pretexto para pasarla en familia. Nosotros, solemos celebrar a los niños difuntos el 1 de noviembre, para posteriormente festejar a los adultos el día 2 y finalmente la fiesta viene el día 3 para todos los vivos, es un choque de emociones muy interesante, se vale estar triste, conmoverse por los que ya no están pero al final esta es una muy bonita fiesta mexicana y tenemos que vivirla como tal” expresó Velázquez Tetatzin.

Así mismo, el padre mencionó que en su opinión lo que se debe celebrar es el Día de Muertos y no el Halloween, expresando que el respeta a quienes gustan de celebrar las costumbres norteamericanas, calificando de inocentes a quienes lo hacen solo por diversión y señalando que mientras sea superficial y sea solo por ese motivo no hay ningún problema. (GABRIEL MARTINEZ)

 

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