QUE NO SON ATÍPICAS

 JUAN ANTONIO MARTÍNEZ BARRIOS

Con la excusa de que trata de lluvias atípicas y de que se requiere una inversión de muchos millones de pesos, autoridades van y autoridades vienen, y el imprescindible e inaplazable drenaje pluvial sigue aplazándose en Torreón.

Los gobiernos municipales consideran prescindibles los trabajos para drenar el agua de lluvia hacia las afueras de la ciudad, a los canales de riego y al lecho del Río Nazas, y optan por otras obras, quizá necesarias, pero no prioritarias como es el desagüe que impida las inundaciones que provocan serias molestias y daños a los ciudadanos cada vez que cae una lluviecita.

Las lluvias atípicas no lo son en realidad, pues en todo caso son cíclicas y se presentan año tras año con 15, 20 o hasta 50 milímetros, provocando el colapso de la ciudad, que se trastoquen en lo general las actividades cotidianas, alcanzando daños materiales y el consabido deterioro del pavimento.

Lo de fondo es que todo drenaje pluvial no puede ir por vía aérea donde luzca en todo su esplendor y los ciudadanos lo admiren; es una obra subterránea que no se ve y que se valoraría únicamente al registrarse precipitaciones pluviales. Por eso no lo realizan, ni siquiera parcialmente.

A estas alturas ya no hacen falta estudios, pues es lo único que ha realizado cada gobierno que tiene Torreón, ya sea de extracción panista o priista, e incluso colegios y universidades tienen listos diversos proyectos para que se emprendan las obras correspondientes. Todos los torreonenses saben dónde se ubican los 25 puntos críticos cada vez que llueve: Independencia, Constitución, Diagonal Las Fuentes, Santiago Ramírez, Revolución oriente, Diagonal Reforma, Allende oriente, entre otros.

Así, en su momento el gobierno municipal de Miguel Angel Riquelme optó por un necesario pero no prioritario teleférico y un metrobús que no pueden terminar, y comprometió su elección gubernamental, pues la ciudadanía reclamaba drenaje pluvial y repavimentación de sus calles.

El alcalde Jorge Zermeño no acaba de sufrir las consecuencias de la escasez de agua potable y hoy vuelven los aguaceros. Por supuesto, los ciudadanos le reclaman drenaje pluvial, una obra que seguramente seguirá posponiéndose. Al fin y al cabo son lluvias atípicas.